Las actividades están a cargo de profesionales de la Universidad Surcolombiana.

 

Como parte del Programa Íctico y Pesquero del Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo, que se viene ejecutando desde hace dos años en convenio con instituciones de educación superior, y que tiene como objetivo la protección y conservación de los peces de la cuenca alta del río Magdalena; se están realizando ensayos de adaptación y liberación de peces en áreas cerca del embalse de Betania, a cargo de la Universidad Surcolombiana.

 

El programa para manejo y protección del recurso íctico y pesquero se desarrolla en tres proyectos: El primero fue un estudio de evaluación de rutas de migración, sitios de cría mediante captura de huevos y larvas, y desplazamiento de las especies a través de jornadas de marcaje de animales aguas arriba y aguas debajo de la presa. Es ésta se identificaron más de 3.000 peces pertenecientes a 45 especies en el área de influencia de El Quimbo; cifra que fue de gran importancia para la continuidad del proceso.

 

Como segundo proyecto, se realizaron estudios biológicos, ecológicos y ambientales, para evaluar los recursos pesqueros y la actividad pesquera comercial y de subsistencia. Allí, se construyeron en conjunto saberes locales sobre ecología y migración de especies, y se realizaron dinámicas participativas comunitarias e institucionales, para la socialización de resultados y educación ambiental.

Por último, el tercer proyecto consiste en el apoyo a las operaciones piscícolas en donde se realiza investigación de biología reproductiva de especies nativas, para establecer los lineamientos para la implementación de proyectos productivos y repoblamientos de importancia pesquera. Además, se establecen estrategias para el manejo de los recursos pesqueros, a fin de contribuir a la conservación y el uso sostenible en área de influencia.

 

Diana Gualtero, Profesional Ambiental del Proyecto, afirma que “se están realizando tres ensayos de adaptación y  liberación de peces, con los que se busca saber cuáles son las mejores condiciones para el manejo los animales que vayan a ser repoblados”.

En los tres ensayos se identificarán las tallas de siembra, las densidades, y el tipo de alimentación de los alevinos. Claudia Castellanos, profesional de la USCO, afirmó que “estos ensayos se realizan en jaulas flotantes de 1 metro cúbico de volumen, ubicadas en Campo Alegre y Betania. La especie seleccionada en este caso fue el bocachico, por ser una especie que se obtiene de los alevinos de forma estandarizada”.

 

Cada ensayo tiene una duración de 6 meses, por lo que el proyecto necesita año y medio para su completa ejecución. Ya se finalizó la primera etapa en donde se identificaron las tallas de animales óptimas para siembra. Se espera en los próximos días, continuar con la segunda fase de densidades, para saber cuántos animales por jaula deben ser repoblados, en función de la talla elegida, para que su crecimiento sea el adecuado.