Rehabilitación de hábitats para la fauna silvestre

en el vaso del embalse de El Quimbo

Se tendrán 4 centros de rescate de fauna en los que se prestará atención médica veterinaria a los animales rescatados

 

El manejo de la fauna durante todo el proceso de adecuación del embalse es un factor de gran importancia, pues permitirá proteger los animales que se encuentran en el área y garantizar su traslado antes del llenado.

 

El Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo ha establecido estrategias de rehabilitación de hábitats para fauna en esta zona, con el objetivo de apoyar su adaptación después del traslado.

 

El manejo de la fauna depende de la especie a la que pertenezca. Las estrategias de manejo se determinan de acuerdo a las características de cada animal para garantizar que sean adecuadas para su protección. Esta labor es realizada por un equipo compuesto por profesionales capacitados como veterinarios, biólogos y zootecnistas especializados en manejo de especies.

 

Con esta iniciativa se busca favorecer el estado de conservación de áreas significativamente representativas de dichos hábitats, con miras a restituir la fauna silvestre, las funciones ecológicas, la estructura y composición florística, y mejorar la conectividad ecosistémica con la vegetación natural.

 

A través del Programa de Manejo de Fauna Silvestre se establecieron las estrategias para la rehabilitación de hábitats, orientados a ampliar la oferta de microhábitats de refugio, alimentación y descanso para la fauna proveniente del vaso del embalse. De esta manera, se realizan actividades antes, durante y después del aprovechamiento.

 

Dentro de este programa, se tienen 4 centros de rescate de fauna en los que se presta atención médica veterinaria a los animales rescatados en las actividades de adecuación del vaso del embalse. De estos, 3 son centros móviles en el margen derecha del río y uno fijo ubicado en el predio el Tabor.

 

En los centros de fauna rescatada se cuenta siempre con la presencia de 2 veterinarios zootecnistas; se recibe los nidos con huevos o con polluelos, y las crías de mamíferos y reptiles son atendidos; se empieza la evaluación de los animales para determinar la fecha de su liberación; y los animales son manipulados estrictamente lo necesario.

 

Posteriormente y cumpliendo los protocolos reglamentarios ambientales y de seguridad, la fauna silvestre compuesta por aves, mamíferos, anfibios, reptiles etc. ubicada en el vaso del embalse será trasladada hacia las zonas de recepción que han sido definidas por sus características ecológicas, que permitirán el desarrollo y permanencia de las comunidades de animales trasladadas. Para su definición, se realizó durante un año, el estudio de flora y fauna mediante muestreos, análisis poblacionales, evaluación de oferta de hábitats y tipos de coberturas.

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Boletín Informativo No. 30